Las pequeñas cosas pueden tener un gran impacto.
Este impacto puede ser positivo o negativo,
pero eso sólo depende de ti.
Aprende a manejar las pequeñas cosas sin que estas arruinen tu vida. Es muy útil poner atención a los pequeños detalles, no obstante es peligroso cuando nos dejamos llevar por ellos. Hay una gran diferencia entre ser disciplinado, cuidadoso y atento a ser obsesivo. La diferencia estriba en la claridad del enfoque, del propósito de tus esfuerzos. Cuando veas las cosas a tu alrededor, trata de verlas como una gran foto donde se puede apreciar todo el paisaje y comprende dentro de ti, que los pequeños detalles son los que recargan tus energías para obtener lo que deseas en esa gran pintura que es tu vida y obsequia el tiempo que necesitas para ello, evitando de esa manera que los detalles cumplan la función de destruir el verdadero propósito que tienes. Nada es mas descartable que la preocupación y la obsesión con detalles triviales que siquiera tienen importancia. Pocas cosas nos brindan más felicidad de la que nos pueden dar millones de detalles, porque lo importante es mantener nuestras intenciones y propósitos en mente, con el fin de ser exitosos, no importa en qué, siempre y cuando eso que buscamos nos haga sentir felices. Has de los detalles tus sirvientes no permitas que dirijan tu vida.
Elio Montiel C